abril 25, 2007

AGUATERA Y MUNICIPALIDAD DE LAMBARE ESTAN OBLIGADAS A DAR SOLUCION
Bruno Guggiari se vuelve intransitable por cráteres y pérdida de agua de Essap

Miles de litros de agua potable se desperdician por día en el barrio Santo Domingo, de Lambaré, a causa de las pérdidas que surgen de los caños de la Essap, según denunciaron ayer los vecinos. El problema ocasiona graves daños a las arterias de la zona y a los automóviles.Una de las más afectadas es la transitada avenida Bruno Guggiari.

A lo largo de la avenida Bruno Guggiari los cráteres son frecuentes. Las pérdidas de agua potable que surgen de los obsoletos caños de la Essap destruyen la capa asfáltica de la transitada arteria.

“Cada día aparece una o dos nuevas pérdidas. Es un problema de nunca acabar. Vienen los obreros de la Essap a reparar uno y al otro día aparecen dos”, se lamenta Martha Chamorro, una de las frentistas afectadas.

Los vecinos piden a las autoridades que solucionen el problema de fondo pues actualmente solo realizan arreglos “parche”, y mientras tanto se pierden en las calles miles de litros de agua potable.

Tanto la Municipalidad de Lambaré como la Empresa de Servicios Sanitarios del Paraguay (Essap) deben trazar un plan para reemplazar los obsoletos caños antes que arruinen por completo todas las calles, recomiendan los residentes.

“Se está carcomiendo todo el pavimento de la avenida Bruno Guggiari y estropeando las calles empedradas del barrio. Aparte, dejamos de recibir muchos litros de agua tratada. Los representantes del pueblo no pueden dejar que este importante recurso natural se desperdicie. En otros países los funcionarios van a la cárcel si ocurre esto”, manifestó Jorge Castro, frentista.

Hace dos semanas la comuna lambareña realizó trabajos de regularización asfáltica en Bruno Guggiari. A los obreros no les importaron las pérdidas que invadían la transitada avenida y vertieron sobre ellas el asfalto.

La reparación no duró ni una semana. “Son unos burros. Primero se debían reparar los caños y luego hacer el recapado. Ahora la calle quedó peor”, protestó Castro.

SUMIDEROS TAPONADOS

Varios minivertederos fueron improvisados en el paseo central de Bruno Guggiari. Cuando llueve, los residuos son arrastrados hasta las bocas de tormenta, evitando que corra el agua.

Otra preocupación de los vecinos del barrio Santo Domingo son las bocas de tormenta taponadas por residuos. Según los afectados, el problema radica en el pésimo servicio de recolección y en la desidia de la comuna en limpiar los desaguaderos.

Aseguran que los días de tormenta el sitio se torna muy peligroso. El agua se estanca en las calles y provoca una feroz laguna que sitia la zona. “Quedamos atrapados por varias horas algunas veces cuando las lluvias no paran”, comentó un frentista.

Fuente: ABC Color - Locales

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