enero 18, 2008


Maniobra judicial a favor de Martínez

El millonario perjuicio causado en la Municipalidad de Lambaré de G. 2.600 millones, durante el periodo del intendente Juan Martínez (2002-2006) quedaría en la nada por la maniobra del dictamen de prejudicialidad del juez Hugo Camé. El Tribunal de Cuentas, precisamente, se caracteriza por su lentitud y cuestionados fallos, por lo que la idea del “blanqueo” no es para nada descabellada.


Juez Hugo Camé

La prosecución que lleva a cabo el fiscal Arnaldo Giuzzio quedaría supeditada a lo que determine el tribunal contencioso-administrativo.

Significa que si en este se dispone que hubo algún tipo de irregularidad, correspondería que la causa siga en el fuero penal, pero los antecedentes de este tribunal no son precisamente los mejores.

El ex jefe comunal, acusado por lesión de confianza, exacción y producción de documento no auténtico, encontró eco favorable en el magistrado Camé, quien no solo resolvió la prejudicialidad de su causa, sino que rechazó la acusación por exacción. Todo fue de manera sigilosa, como “regalo de fin de año”, por medio del A.I. N° 29429.

Camé, con relación a la prejudicialidad, dijo que el encausado Juan Martínez “ha sometido su gestión al legislativo municipal, habiéndolo este aprobado, y que no consta que la Contraloría General de la República haya impugnado o no su gestión, remitiéndolo al tribunal competente, para que jurisdiccionalmente se determine la comisión o no de posibles hechos punibles”.

También rechazó la acusación por exacción (cobro irregular de impuestos), alegando que se violó el principio constitucional de legítima defensa, porque se lo imputó por este delito 48 horas antes de la fecha en que pidió prórroga del plazo para acusar. Sin embargo, Martínez sí fue llamado a declarar por el mismo.

EL PERJUICIO

Al igual que Martínez, fueron acusados en esta causa los funcionarios Luis Martínez, fiscalizador del Departamento de Salubridad; Roberto Romero, cajero; Gerardo Román, visitador; Nicolás Denis y César Martínez, director de Recaudaciones, hermano del ex jefe comunal. Giuzzio detectó tres aristas de corrupción, ya que de los G. 2.600 millones, un total de G. 750 millones corresponde a una caja paralela que había en el municipio; otros G. 970 millones a desvíos que se registraron en el Departamento Fitosanitario de Salubridad, y G. 880 millones a sobrefacturaciones en obras viales, puentes y muros de protección. Inclusive, el agente había dicho que el perjuicio puede ascender a US$ 3 millones.

Fuente: ABC Color

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